PREPARADOS GASEOSOS
”Y quemarás incienso aromático, dulce al Señor; de mañana y tarde lo quemarás como aroma de suavidad, ofrenda encendida al Señor”.— Éxodo 30:7-8

John William Waterhouse (1849–1917)
The Magic Circle, 1886. Óleo sobre lienzo, 183 × 127 cm. Tate, Londres, N01572.
CONDENSADORES FLUIDICOS — AÉREOS (GASEOSOS)
Sahumerios, vapores y perfumes: acción inmediata, proyección y purificación
Introducción: la acción de lo volátil
Los condensadores gaseosos ejercen un efecto inmediato sobre la percepción y el espacio. La tradición lo reconoce:
“Los vegetales son seres vivientes y como tales poseen un ‘aura’, esto es, una especie de efluvio causado por un óleo esencial que emana de la madera y de las hojas. La influencia psíquica que ejercen cuando se queman es conocida desde la antigüedad.” (L.K., fragmento suministrado).
Bardon encuadra los vapores dentro del sistema de condensadores:
“Existen tres grupos principales de condensadores fluídicos: 1. Sólidos, 2. Líquidos y 3. Aéreos.” (Bardon, Iniciación al Hermetismo,).
Naturaleza y función: cómo actúa un aéreo
El vapor y el humo desplazan el fluido inmediatamente; su ventaja es la velocidad y la penetración: limpian, delimitan e inducen el estado necesario para el trabajo. Bardon, aunque no desarrolla tanto los vapores en los fragmentos que me diste, los incluye expresamente en su clasificación como condensadores operativos:
“El segundo grupo es compuesto por los fumadores, aromas, agua de olor, en fin, todos los vapores; no entraré en mayores detalles sobre ellos, por lo tanto no tienen mucha importancia para la magia práctica.” (Bardon, Iniciación al Hermetismo).
(Aunque Bardon relativiza su importancia en el pasaje citado, las fuentes populares demuestran su eficacia práctica: el humo prepara el espacio, la mente y el cuerpo para la recepción.)
Aplicaciones prácticas y ventaja para el comprador
Hoodoo: el humo y los polvos ardientes son herramientas directas de limpieza y «marcado» del espacio. Desde la perspectiva comercial, los sahumerios preparados para propósitos concretos (protección, atracción, apertura espiritual) son productos de alta rotación: fáciles de usar y con resultados inmediatos.
Brauche: la fumigación en fechas rituales (por ejemplo, durante festividades o en rituales de paso) es una práctica de comunidad; el sahumerio, en este contexto, funciona como ritual de mantenimiento: repetido en ciclos, protege y re-consagra el lugar.
Hoodoo y Brauche — el uso tradicional de vapores y sahumerios
Hoodoo: el humo y los polvos ardientes son herramientas directas de limpieza y «marcado» del espacio. Desde la perspectiva comercial, los sahumerios preparados para propósitos concretos (protección, atracción, apertura espiritual) son productos de alta rotación: fáciles de usar y con resultados inmediatos.
Brauche: la fumigación en fechas rituales (por ejemplo, durante festividades o en rituales de paso) es una práctica de comunidad; el sahumerio, en este contexto, funciona como ritual de mantenimiento: repetido en ciclos, protege y re-consagra el lugar.
(Cita hermética que conecta intención y aroma) — Agrippa subrayó la importancia de la exposición ventajosa de la materia a la influencia celeste:
“Así la armonía celeste muestra la virtud que está oculta en la materia, la excita, la fortalece y la hace aparecer; y por así decirlo, de potencia la reduce a acto, cuando estas cosas son expuestas ventajosamente, o en tiempo, al cuerpo celeste.” (Agrippa, 1533, Cap. XXXIV).